A 24 años de la partida de Luca Prodan

Luca Prodan no vino a morir a la Argentina, pero ocurrió. Llegó desde en enloquecido Londres de principios de los 80 para vivir, para escapar de la heroína. Entre paisajes y amigos, zafó durante el tiempo suficiente como para cambiarle la cara al rock argentino con Sumo.





Había nacido en Roma (Italia) el 17 de mayo de 1953, y desde pequeño, por sus hermanas, se vinculó al arte (especialmente al cine y a la música).

Luca asistió al colegio escosés Gordonstoun, donde compartió claustros con el Príncipe Carlos de Inglaterra y con los hijos de los hombres más acaudalados de Europa.

Eran los años 70, y en Londres se relacionó con el movimiento punk, después de haber abrevado en la psicodelia. Allí formó su primera banda, The New Clear Heads.

En Londres Luca se convirtió en adicto a la heroína; estuvo internado varias veces, hasta que motivado por una postal que le envió su antiguo compañero de colegio, Timmy McKern, resolvió viajar a las sierras cordobesas.  Allí nació Sumo, y con él el mito del italiano loco y revolucionario. Hoy se cumplen 24 años de su muerte, y su imagen sigue creciendo.








Fuente: nora de LA GACETA